Natalia Acosta - Narrativa
Narrativa que oscila entre la fábula, la alegoría y la novela. Por primera vez, Acosta publica un relato que adopta modos convencionales: narrativa en 1º persona, con acciones que se suceden en un orden lineal, aunque descompuesto en pequeños fragmentos o “escenas”.
El protagonista del relato, quien padece una enfermedad terminal, regresa a la casa de veraneo de su infancia y allí encuentra, entre otros animales, a Rotundo.
La apuesta de la autora es la creación de pequeños “cuadros”, condensados, de estados de ánimo. En cada uno se ensaya el terror a la persistencia de lo vivo en medio de lo muerto, a la “circulación de la destrucción”. En este ambiente, Rotundo es una presencia que incita al protagonista a tomar decisiones vitales. La sensación es la de que ningún abandono provoca la muerte del otro - el abandonado- sino todo lo contrario.
El diseño de cubierta es de Damián Miroli.
Tamaño: 10,5 x10,5 cm.
Nº de páginas: 45. Blanco y negro.